LDZ – «Un pacto para vivir», de el cachetazo institucional a la asunción insólita

En el centro Cordera, junto a Carlos Vaccaro (secretario) y Claudia Darfé (subsecretaria administrativa).


Asunción de concejales/as con cachetazos, con disparates institucionales, una intendenta que no habló, un presidente del HCD que fue electo por otro partido, condimentos que jamás habían sucedido en Lomas de Zamora


«Un pacto para vivir»,  así cantaba el pelado Gustavo Cordera la canción del álbum De la cabeza,  y pareciera emular no sólo el apellido del ilustre cantante de la Bersuit con la suerte del flamante presidente del HCD lomense, Diego Cordera.

Porque el edil elegido por Insaurralde para comandar las huestes del peronismo y FdT local, fue electo en 2019 por Juntos por el Cambio. Fue presidente del bloque, alternando el poder con Gabriel Mércuri. Fue duro, ácido, crítico y muy amarillo para defender las políticas impuestas por Macri en su momento y con castigos hacia Alberto Fernández y Cristina Kirchner, a los que hoy defiende con uñas y dientes.

Pero hoy, es el presidente del cuerpo legislativo ya dentro del FdT, acuerdo que logró el año pasado con Insaurralde donde anunció su traspaso. También se pasaron de bando Fabio Denucchi y Sandra Ferreyra, al ver la decadencia política del frente JxC.

Todo el arco del peronismo se dice indignado por la mención de Cordera en ése cargo, es más ya hay algunos dirigentes lomenses que dejaron entrever que habrán represalias contra Cordera. En especial, en redes sociales, estilo Trolls de Marcos Peña Braun.

En éste último año, Cordera fue uno de alfiles principales defensores del programa de gobierno Nacional y Provincial, pero en especial de las políticas impulsadas por Martín Insaurralde. Y recibió su recompensa, pero detrás hay acuerdos que van más allá de la mera defensa.

La institucionalización de la anti ética

 

Las reglas de juego de la política partidaria no siguen la lógica. Hay pases de un espacio a otro, de abandonos, de acuerdos, todos con ansias de la búsqueda de más poder y posicionarse cada día más arriba. Sucede muy a menudo, aunque no sean éticos. Y nos preguntamos, hoy la ética, la moral ¿Es una valor en sí mismo, o fue desnaturalizada y degradada su importancia?

Pero el concejal Cordera no es el responsable solamente de éste entuerto, sino que además en la asunción de ediles el jueves (ayer) de ambas fuerzas políticas (Frente de Todos y Juntos) ya estaba «cocinada» la movida realizada en una sesión especial dos días antes. Hecho que fue mencionado por éste cronista en otra nota.

Los siete concejales nuevos (de un total de 17 que tiene el FdT) que asumieron el jueves, no participaron de la «rosca», pero sabían de la cuestión. Es así que ninguno levantó la mano cuando se le preguntó al cuerpo si aceptaba a Cordera como presidente del HCD.

Tampoco levantó la mano ninguno de los 7 concejales de Juntos, que lo tuvieron como su compañero por varios mandatos y fue jefe de su bloque. Ya estaba arreglado y «consensuado». Insólito pero real, apoyaron su designación.

Otra cuestión extraña y que jamás sucedió en ése recinto, fue que estando presente en primera fila la actual intendenta interina, Marina Lesci, no haya dirigido la palabra ni la hayan convocado a hacerlo. Inaudito pero real. Pasan muchas cosas en éste Deliberante, y no son cómodas de señalar.

Lo que si hicieron ruido y estruendo, fueron los tres «cachetazos» que se comió Pablo Paladino ex funcionario municipal; las fuentes aseguran que las mismas fueron propinadas por un conocido empleado municipal acostumbrado a «disciplinar» con maltratos físicos a los que no piensan o ven las cosas como Insaurralde.

Después hubo despedidas, abrazos de ediles salientes, discursos, cánticos de las barras y afuera algunas muestras de alegría de todos los colores partidarios, que sólo el círculo de la política ve y disfruta.

 

Entradas relacionadas

Deja tu comentario